El mal de ojo, cuyos orígenes antiquísimos parecen ser comunes a diversos pueblos, es una superstición universal que en Asturias-al igual que en muchas otras regiones-prendió con bastante fuerza.
Aunque hubo quien pensó que el aojo-aquí llamado "agüeyu"-era (cosa natural y no hechicería), por lo general no se creía en esta explicación, atribuyendo a quienes producían el mal una fuerza especial y peligrosa. Dichas personas solían poseer algún defecto físico o moral y algunas de ellas ignorar su facultad. Así,estaban singularmente dispuestas a producir el mal las lisiadas, las personas que tienen dos niñas en cada ojo, las que poseen la vena del entrecejo muy abultada y las solteronas, por ejemplo, originándose el aojo por envidia, por maldiciones, por alabanzas abusivas o exceso de cariño, pudiendo ser contraído en cualquier lugar, abierto o cerrado, quedando sujetos a él personas y animales sanos y hermosos y exentos de tal posibilidad los feos. A veces, quien producía el aojo podía anularlo y el proceso daba inicio con un desmejoramiento del aojado quien, perdiendo todo tipo de estímulos para vivir, adelgazaba y se consumía hasta sobrevenir la misma muerte.
más si quien recibe el hechizo es portador de ciertos objetos, sus efectos quedan anulados, no causando trastorno alguno por ser dichos objetos receptores del daño que, si es muy fuerte, los puede incluso quebrar en algunos casos. en la prevención del aojo se han utilizado infinidad de amuletos variados. Hubo infinidad de amuletos contra el mal de ojo (cuernos, colmillos...)más la que interesa en este trabajo es la higa, llamada en Asturias "cigua": la figuración de la mano cerrada en la que el dedo pulgar pasa por entre el índice y el del medio.
Afirma Carmen Baroja que la de azabache es amuleto genuinamente hispánico, habiéndose utilizado en otros países la mano en diferentes posturas, con fines parecidos, como en Italia la llamada
"mano cornuta", generalmente de coral y, entre los musulmanes y pueblos orientales, la mano abierta, la "jansa"o "mano de "fatma". Aunque las de azabache fueron en España las más abundantes, no fueron las únicas. También se hicieron de coral, nacar, hueso y cristal.
El principal centro proveedor de las higas fue Santiago de Compostela-en Galicia."figas"-donde desde el siglo XV, la industria del azabache alcanzó un notable desarrollo, más no conviene olvidar que los talleres artesanales de Villaviciosa y Gijón elaboraron gran número de ellas, buena parte de las cuales eran exportadas a tiendas santiaguesas.
El "agüeyu" fue creencia muy extendida en Asturias y el uso de la "cigüa" práctica muy común.
("Pero fáltate la cigua:
¿Y quién sin ella le trai,
Andando pel mundu bruxes,
Que te pueden agüeyar?
Tengo yo una de azabache,
Bien curiosina en verdá,
Que la punxe munches veces
De pequeñucu al mió Xuan:
Has atála na muñeca
Con medides de Candás
Y pondraste más llozanu
Que cuantos neñinos hay...")
-José Caveda y Nava-.
Fuente visitada.
Azabachería Asturiana.- Valentin Monte Carreño.
Muy guapu, de verdá, muy guapu, prestome muchu
ResponderEliminarmentira sunormal
EliminarSantiago de Compostela fue el principal centro, por el boom del camino de Santiago.
ResponderEliminarLos azabacheros asturianos emigraron para allí al ver el negocio que había.
Y no hay que olvidar que la mayor fuente de materia prima, eran los yacimientos asturianos que lo vendían sobre todo para Santiago e Inglaterra.