miércoles, 22 de febrero de 2012
LA SAUCEDA DE BUELLES
A orillas del río Deva, entre las poblaciones de El Mazo y Buelles, en el concejo de Peñamellera Baja, muy cerca ya del límite oriental con Cantabria, encontramos una de las vegas fluviales más bellas de Asturias. Declarada Monumento Natural, la sauceda de Buelles es una jungla cercana, un lugar tupido y agreste que permite el paso en su interior a través de un camino ribereño pero que exige el máximo respeto medioambiental.
Ya se sabe que los sauces prefieren suelos profundos y húmedos, creciendo lozanos aún dentro del agua. Este hábitat peculiar que buscan es el que nos permite pasear por esta orilla del Deva al amparo de la sombra de sus copas, una sombra que en algunos puntos se convierte en impenetrable, cuando la foresta alcanza su máxima densidad.
Las riberas de los ríos asturianos estuvieron pobladas de los bosques más diversos en especies. Sin embargo, al tratarse de ambientes de gran productividad agrícola gran parte de los bosques de ribera han sido talados. De ahí la importancia de esta sauceda que sigue creciendo en los tramos medios del Deva y que constituye una vega en óptimo estado de conservación, más propia de los tiempos pasados.
Las orillas de los ríos caudalosos como el Deva, muy apropiadas para ser inundadas por el agua, es el lugar donde las especies más resistentes de sauces lograron implantarse definitivamente. Todo es fruto de un proceso de adaptación muy largo y laborioso. La ejemplar vitalidad de la sauceda de Buelles se ha ido creando como un fortín, tronco a tronco y poco a poco; a través del paso del tiempo y del agua. Este bosque ribereño se ha defendido con uñas y dientes gracias a una primera cintura de protección constituida por saucedas arbustivas, perfectamente adaptadas para soportar los embates de las avenidas fluviales. Tras ellas encontramos una segunda cintura se saucedas arbóreas: probablemente la mayor y mejor desarrollada de toda la cornisa cantábrica.
Estamos y a un poco más lejos del cauce, en áreas que no sufren el efecto mecánico de la riada pero que periódicamente son anegadas por las aguas. Aquí es dominante el sauce blanco (Salix alba), especie de gran porte. Habitualmente estas saucedas más interiores han sido uno de los ambientes que en mayor medida han sufrido la agresión humana, dada la extrema fertilidad de los suelos sobre los que se asientan. En Buelles, sin embargo, no se conoce esta agresión, convirtiéndola en una ribera de excepcional interés natural y patrimonial.
El interés faunístico también es considerable. Existen en el área colonias de cría de avión zapador (Riparia riparia) y también son comunes la nutria (Lutra lutra) y la lamprea (Petromyzon marinus). Estas especies están incluidas en el Catálogo Regional de Especies Amenazadas de la Fauna Asturiana.
Además, están presentes otras especies tan interesantes y bioindicadoras de la calidad de las aguas como son el salmón atlántico (Salmo salar) y el desmán (Galemys pyrenaicus).
Por otro lado, la aldea de Buelles, así como otras circundantes y próximas a la sauceda que lleva su nombre, presentan un atractivo más que el estrictamente natural. Los inmuebles de indianos salpican el paisaje rural en esta zona. Como ocurre en general en toda Peñamellera Baja. La riqueza del patrimonio arquitectónico en este municipio se cuida con mimo, y bien merece una visita atenta y pausada.
Fuente visitada.
desdeasturias.com
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Muy interesante...y hermosa comarca !
ResponderEliminarMandame información
ResponderEliminarMuy interesante tu blog....me gusta.
ResponderEliminarComo siempre,no tenia ni idea,un bonito lugar para conocerlo, a ver,por que cada dis estoy mas liado.
ResponderEliminarSabes Marisa,mi compañero que es de Campo de Caso,me comento que la parte alta del Nalon esta llena de nutrias y que acaban con todas las especies del rio,espero que no sea verdad.
Saludos